De La Pendilla al Pico Tres Concejos (23/04/2009)Para VER el album PINCHAR en la foto
La ruta parte del pueblo de Pendilla (1.337 m.), llegamos y nos compusimos botas, bastones y demás telares siempre acompañados de 3 ocas que no paraban de graznar a nuestro alrededor.
Cruzamos un pequeño puente de hormigón que libra el arroyo y continuamos por una pista bastante ancha que va en continuo pero leve ascenso siempre con el arroyo a nuestra izquierda. Al poco rato llegamos a una nave de uso ganadero que pasamos de largo y un poco más arriba cogemos el camino de la izquierda que se ve perfectamente como va en zigzag subiendo por la ladera de nuestra izquierda. Desde este punto vemos un hermoso valle de Bustamores con el arroyo serpenteando por sus praderas de un verde intenso y con un todavía desangelado hayedo que retiene la nieve caída, pero que no puede evitar que los efectos del deshielo produzcan pequeñas cascadas de agua que se abren paso entre los majestuosos troncos y que llenan el valle de un constante murmullo producido por el agua.
Así casi sin darnos cuenta llegamos a la Collada Propinde (1.589 m.), allí paramos un rato para leer el panel que nos explica que en este punto se asentó un campamento romano llamado Carisa y que todo este recorrido que hemos hecho es una calzada romana que une León con Asturias, concretamente con tierras del Concejo de Aller. Desde aquí podemos ver el hermoso valle asturiano y las vistas ya son espectaculares, se ve perfectamente Peña Ubiña y la zona de Pajares.
Al llegar a este punto la ruta sigue por la cresta, el pequeño camino va paralelo a la alambrada, abriéndose paso por entre las escobas, pero nosotros seguimos por la calzada romana y después de pasar por un nevero que tapaba el camino, (hasta este punto la nieve la habíamos visto de lejos), a unos doscientos metros decidimos subir como decimos nosotros “a derecho”, nos costó un “güevo”, de hecho tuvimos que ir turnándonos para subir, ya que la nieve estaba un poco blanca y era muy pesado subir, pero con mucho esfuerzo subimos y fuimos a dar justo al pico anterior al Pico Tres Concejos, así que nos armamos de valor y hicimos el último tramo hasta llegar a la cima del Tres Concejos (2.020 m.).
Como siempre merece la pena todo el esfuerzo, es precioso y además hacía un día tan bueno que pudimos comer arriba con un panorama inmejorable, la bajada fue como tenía que haber sido la subida por la cresta hasta la collada Propinde y de nuevo por la pista hasta Pendilla.
En Pendilla nos esperaban las ocas y a mi se me ocurrió la feliz idea de limpiar mis botas en el arroyo, que debe ser de propiedad de ellas y casi me tiran al agua.
