Llombera-Coladilla-Valporquero (15/03/09)
Para VER el album PINCHAR en la foto
Este día decidimos hacer la ruta de Llombera a Valporquero, es una ruta que tiene el inconveniente de que como nos movemos en nuestros coches, pues hay que dejar uno en el destino para así poder volver a punto de partida y recoger los coches que han quedado allí. Por esta razón, salimos dos coches de León dirección Valporquero. Las hoces de Vegacervera son preciosas, el río que baja desbravabado entre esas enormes paredes que parece que te van comer, es digno de disfrutar, como para disfrutar es la subidita al pueblo de Valporquero.Dejamos el coche a la entrada del pueblo y en un solo vehículo nos dirigimos a Llombera por la carretera de cruza de Vegacervera al pueblo de La Vid. La carreterita tiene “bemoles”, además de mala encima en obras, por fin en La Vid cogimos la nacional dirección León hasta que encontramos el cruce que nos lleva a Llombera. Por supuesto, cuando llegamos allí ya estaban esperando todos los Romeros que decidieron hacer la ruta.Partimos del crucero que está junto a la Iglesia hacia arriba hasta que llegamos al pequeño pilón que hay al final del pueblo, desde el pilón tenemos que subir de frente, no hay un camino propiamente definido, hay que subir dirección norte y dejar a nuestra espalda el pueblo de Llombera, poco a poco llegamos a un alto desde el cual cogemos un camino que a través de escobas y pequeños robles nos lleva a una zona muy amplia totalmente abierta desde la que se ve perfectamente la carretera de la mina, carretera que cruzamos para coger un camino que sale un poco más adelante a mano derecha que nos lleva a una escombrera bastante empinada que tiene dos piedrones enormes arriba del todo (los piedrones se ven perfectamente desde la carretera). Por esta escombrera cada uno decide subir como quiere o puede, unos como decimos nosotros “a derecho” y otros en zig – zag que es bastante más llevadero.
Por fin llegamos arriba y aprovechamos para hacernos unas fotos, beber agua y descansar un poco. El panorama ya desde aquí es desolador, al fondo, muy lejos se ven grandes montañas y presidiendo el Cueto San Mateo, pero si echas la vista a todo lo que no sea lejano es para ponerse a llorar, todo escombreras y una mina inmensa, por favor no os perdáis las fotos para que os hagáis una idea de la destrucción que estas minas a cielo abierto provocan en el medio.
Seguimos dirección norte por terrenos de la mina, primero bajamos por una escombrera con unas grietas enormes, después caminamos por pistas de la mina y por último subimos a una pequeña loma por entre un pequeño bosque de robles muy jóvenes.
Al llegar a esta pequeña collada podemos ver dos pueblos, el primero es Coladilla y el más alejado es Vegacervera, vemos dos caminos que nos pueden llevar a Coladilla uno al Oeste y otro al Este, decidimos que bajábamos por el de la derecha, es decir, por el Este, pero antes de seguir paramos a comer.
Como siempre, bocata, café, gotitas y chocolate, bromas, risas y valoraciones de la ruta hasta el momento. Todos consideramos que la ruta es de pena, que más fea imposible….
El camino no tiene pérdida desciende hacia el pueblo, pero estaba lleno de bastante nieve y encima blanda, por lo tanto el que no llevaba polainas se mojó. Por el camino encontramos dos fuentes con sus respectivos pilones, una lavadora tirada llena de oxido y ya llegando al pueblo bastante suciedad, la verdad es que hubo un Romero que se dedicó a limpiar todo lo que pudo, la verdad es que una pena….
Llegamos al pueblo de Coladilla, un pueblo con mucho ambiente, con una fuente preciosa, con un agua fresca que aprovechamos para llenar nuestras cantimploras. De aquí salimos dirección Valporquero siguiendo las indicaciones de la ruta por lo tanto atravesamos el pueblo, seguimos unos 500 m. por la carretera y tomamos un camino a la derecha que nos lleva en constante subida a través de un robledal hasta una zona de roca caliza, bastante abierta, con pastos, desde la que seguimos el camino que está perfectamente definido y llegamos a un punto desde el cual podemos ver al fondo el pueblo de Valporquero, para llegar a él tenemos que atravesar una zona ocupada por pastizales encharcados y unos arroyos repletos de agua del deshielo.
Por fin, llegamos a Valporquero, parecía un pueblo fantasma, no había nadie, todas las casas parecían cerradas y no tenían ni un pequeño teleclub de pueblo donde poder tomar un refresco, bueno como sería que no vimos ni un triste perro. Por lo tanto, los que no conducíamos tuvimos que esperar sentados en el suelo y en las escaleras de una casa, por supuesto vacía, 1,30 h. hasta que nos vinieron a buscar los que habían ido a Llombera a recoger los coches. Se nos hizo de noche y pasamos un poco de frío, pero eso sí, la espera la llevamos con mucho humor.
