Valporquero - Villamanín (2/02/2008)
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La ruta parte del mismo pueblo de Valporquero hacia el oeste. Pronto alcanza una extensa vega, y poco a poco, se alcanzan los puertos de Valle de Vegacervera, un vasto territorio calizo ocupado por pastizales naturales, donde abundan las cuevas y las dolinas. A partir de aquí se desciende hasta el pueblo de Valle. Por el camino del cementerio, la senda de La Gallega conduce a Coladilla. La ruta continúa ganando altura, se abandona el valle y se regresa a Valporquero. El camino carretero se ha perdido y hay que continuar por una senda que desciende hasta el arroyo del mismo nombre. La ruta completa es de 11 kilometros, de 4 horas de duración y dificultad media.
No penséis que está equivocado el título y el texto, los equivocados fuimos nosotros, que tuvimos una "Coladilla" y nos desviamos del camino y empalmamos con la ruta Valporquero Villamanín. Ya por el camino comentábamos que no se veía la señalización de la ruta, que normalmente está siempre señalizada. Al llegar al Collado de Formigoso, divisamos a lo lejos un pueblo que convencidos pensamos que era Coladilla, incluso utilizamos la brújula para ver los grados a los que se situaba dicho paraje (52º W), y comenzamos el descenso, hasta llegar a un punto donde se ve la carretera nacional, la vía del tren y algún que otro túnel, algún romero (Maite) comento que parecía Villamanín, pero nadie quiso creerlo, hasta que al final efectivamente estábamos en Villamanín.
Loli en su desmedido entusiasmo por andar por el monte propuso que Loli y Alfonso fueran a Coladilla, para recoger los coches, no creo que hubiéramos llegado ni siquiera el sábado, pero bueno por iniciativas que no quede.
Después de tomar un café, para ver la verdadera situación de dónde quedaba Coladilla y por dónde volveríamos, entre las risas de los dueños del bar y las nuestras propias decidimos ir hacía Cármenes, por la carretera, con la esperanza de que o bien Juancar o Maria Isabel nos recogieran para ir a por los coches a Valporquero.
Después de andar aproximadamente 3 kilómetros y varios intentos por parte de Isabel de que algún coche nos acercara hasta Cármenes, lo consiguio y entre un matrimonio y Juancar llegamos todos a Cármenes desde nos desplazamos a por los coches mientras el resto descansaban en el ya tradicional bar de Isirodo y Antonina.
Pero aunque nos equivocaramos, la ruta fue muy bonita y divertida. Así todo lo volveremos a intentar la de Valporquero a Coladilla, pero esta vez al revés.
Hemos estado hablando y para la próxima vez, vamos a preparar un plan estratégico y vamos a situar un coche en Valporquero, otro en Coladilla, otro en Villamanin, en Pola de Gordón, y por si las moscas otro en La Vecilla ... Así seguro que lleguemos donde lleguemos tendremos coche.
Hasta el finde que viene.
